Ejemplo

Susana es ingeniero y trabaja a jornada completa. Tiene dos hijos, Lucas (5) ySonia (8) y juega regularmente a squash.

El tiempo que pasa con sus hijos transcurre conscientemente, sin distracciones. Cuando está con sus hijos, Susana juega con ellos, les lee algo o inicia cualquier actividad que les divierta a todos. Con ello compensa el escaso tiempo que pasa con los niños. Aunque Susana no está libre de sentimientos de culpabilidad, ha encontrado una vía para asumir el problema. Ha cedido, como ella dice, todos los «servicios destinados al niño» a una «madre de día» en la que tiene plena confianza, la cual les recoge de la escuela y guardería, les prepara la comida y se ocupa de ellos hasta las cinco y media de la tarde. Dos tardes a la semana viene su suegra a acostar a los niños, mientras Susana juega a squash y después va a tomar una cerveza con su marido Pedro y algunos amigos.

Si tiene la mínima sospecha de que sus hijos pueden necesitarla durante más tiempo, lo comenta con ellos. A menudo se originan conversaciones con los niños muy instructivas que le transmiten con qué exactitud la observan y con qué precisión detectan si su madre está del todo con ellos o sólo a medias, debido a un problema de trabajo que la ata internamente. Para Susana, las indicaciones de los niños son muy importantes, pero ello no significa que pierda de vista sus propios intereses.

0 comentarios:

Publicar un comentario

Otros consejos para madres